El Llamado a la Intercesión – Pt. 1 (Introducción)

INTRODUCCIÓN

Antes de empezar, quiero decirte que la Intercesión es el llamado más importante de tu vida, es quién eres; es y será tu identidad por siempre, fuiste creado por Dios, a imagen de Dios, para interactuar con Él, y ser intercesor es la forma en la que fuiste diseñado para funcionar.

Ser una persona de oración es el llamado más alto que una persona pueda tener; y si queremos crecer como familia, padres, empresarios, profesionales y como cristianos, debemos dedicar tiempo a crecer en la oración. Una de las mejores cosas que podemos hacer para mejorar nuestra calidad de vida y nuestras relaciones, es crecer en esta realidad.

Jesús dijo: “Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas [Todos Sus recursos; dirección divina, protección, provisión, prosperidad, paz, Salud, sanidad en las emociones, salvación de los perdidos, revelación, avivamiento, sabiduría, justicia, etc..]  os serán añadidas”.  Mt. 6:33 *Énfasis añadidos

Aunque no todas las personas están llamados a predicar desde una plataforma, o tener un ministerio público; cada uno está llamado a la oración. Dios llama a cada creyente a tener una vida de oración, desde los nuevos creyentes hasta los más experimentados.

Jesús afirmo que el ser humano es incapaz de llegar a la plenitud de su destino sin permanecer en Él; es decir, es imposible crecer espiritualmente y dar fruto, sin crecer en oración.

“Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, este lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer. Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho.” Jn. 15:5,7

Jesús nos está diciendo: “no puedes crecer en tu vida espiritual por ti mismo, no puedes crecer espiritualmente viviendo de forma independiente de mí”. Para el ser humano, crecer en Oración es central, no es opcional. Crecer en Oración no es algo exclusivo para un grupo selecto de personas dentro de la iglesia; la oración es la forma cómo alcanzamos la plenitud de nuestro destino en Dios, experimentando los nivel más profundos de relación y satisfacción en Él.

En la mente de Dios, ser personas de oración es lo más genuino que tú y yo podemos ser; es de esta manera que nos diseñó para funcionar. He escuchado comentarios incomodos en contra de personas que tiene una vida de oración: “tu si eres espiritual, tu si eres religioso, ya cálmate, no exageres, …”. No te preocupes por estos comentarios, no te ofendas, no te excuses y no te defiendas; ora por ellos. Estás siendo obediente al llamado de Dios, el cual es el más importante de tu vida, sigue haciéndolo en humildad, sigue amando a los demás, no te desanimes.

Fuimos diseñados para interactuar y asociarnos de forma profunda con Dios, de eso se trata la oración. No hay nada más auténtico y verdadero para ser quienes Dios nos creó, que crecer, funcionar y operar en un espíritu de oración. No hay nada más natural para el ser humano que crecer en esta realidad.

Y al mismo tiempo, no hay nada que el enemigo ataque más en nuestra vida que esta realidad, el enemigo quiere evitar que entendamos esto, y quiere apagar nuestra vida de oración a toda costa; porque sabe, que NO HAY NADA MÁS AUTENTICO A NUESTRA IDENTIDAD COMO SERES HUMANOS QUE SER PERSONAS DE ORACIÓN. ¡Es un hecho de la vida real!

NUESTRA IDENTIDAD ETERNA

Ser Intercesor es nuestra identidad eterna. El Espíritu Santo reveló por medio de Isaías, que la identidad y el destino eterno del pueblo de Dios en todo el mundo, es ser una Casa de Oración; es decir, una familia que gobierna con Dios en intercesión como Su tarea fundamental; personas que crecen en oración individual y colectivamente. Isaías profetizó que llegaría un tiempo cuando el pueblo de Dios en todo el mundo disfrutaría de la oración (Is. 56:7). Jesús en los cuatro evangelios citó a Isaías para resaltar la importancia de esta verdad (Mt. 21:13; Mr. 11:15-19; Lc. 19:45-48; Jn. 2.13-22).

"yo los llevaré a mi santo monte, y los recrearé [disfrutarán] en mi casa de oración; … porque mi casa será llamada casa de oración para todas las naciones". Is. 56:7

Y les dijo: "Está escrito: Mi casa será llamada casa de oración". Mt. 21:13

Ser Intercesores no es nuestra única identidad, somos hijos e hijas de Dios, somos Su familia, somos Su Novia, Somos el Cuerpo de Cristo, somos real sacerdocio; pero ser una persona de oración es nuestra Identidad más importante. Nuestra identidad como hijos de Dios y como novia de Cristo vienen a ser parte de pertenecer a Su familia; una familia que gobierna con Jesús a través de la “intimidad^[1] basada en la intercesión”.

La oración es el medio principal para liberar el poder de Dios en la tierra, y la razón es, porque es así como Dios creó al espíritu humano para funcionar al máximo. Si tú y yo queremos funcionar en la plenitud de nuestra identidad como familia de Dios y caminar en la plenitud de nuestros destino, debemos crecer en la oración. La oración es el lugar en donde experimentamos nuestra mayor identidad, poder, autoridad, dignidad y honor.

EN CONTEXTO ¿CÓMO LLEGAMOS A SER INTERCESORES?

Fuimos salvos para interactuar con Dios; a partir de la muerte, resurrección y ascensión de Jesús, Él no solo intercedió en la Cruz para Salvarnos; Jesucristo nos reconcilió con el Padre, Él intercedió para abrir un camino permanente para que nosotros pudiéramos llegar y tocar Su corazón, e interactuar de forma cercana y profunda con Él. (Ro. 8: 34; He. 7: 25).

En esta dinámica, cuando comenzamos a conocer el corazón De Dios, Sus emociones, Sus secretos, Sus pensamientos acerca de nosotros y nuestras familias, Sus planes y propósitos globales; Y PERMITIMOS QUE ESTO IMPACTE NUESTRO CORAZÓN, el resultado es que se genera en nosotros un clamor de intercesión, porque conocemos las cosas que están en el corazón de Dios.

INTERCESIÓN ES:

• Clamar por las cosas que están en el corazón De Dios, para que se manifiestan de una de forma tangible en la tierra. Ver  nuestro Blog: ¿Cómo Orar por Colombia? – puedes usarlo para tu país.

• Intercesión es intimidad con Dios; se trata de cómo somos cautivados por las cosas que cautivan a Dios, al ser atraídos a Su Corazón, y después, desde ese lugar de compañerismo, desatar Sus propósitos hacia la humanidad.

• La intercesión responde a las preguntas, ¿Quién es Dios? ¿qué piensa Dios? ¿qué está sintiendo Dios? ¿Qué Dios quiere hacer en esta temporada? ¿Qué hay en Su corazón?, … y cuando somos atraídos por estas preguntas, el resultado es que incrementa nuestra vida de oración.

“La comunión íntima de Jehová es con los que le temen, Y a ellos hará conocer su pacto”. Sal. 25:14

• El propósito principal de la intercesión es asociarnos profundamente con Dios, al colaborar en el cumplimiento de lo que ya dijo en Su palabra. Cuando nos damos cuenta de que la intercesión es un acto de colaboración en lo que Dios ha decretado, eso cambia radicalmente la forma en que participamos en la intercesión.

• El Padre es un Intercesor (Jn. 3:16), Jesús es un intercesor (Is. 53; Ro. 8:34; He. 7:25), El Espíritu Santo es un intercesor (Ro. 8:26)

• Un Intercesor es un íntimo de Dios, y alguien quien cultiva intimidad con Dios se vuelve un intercesor. No puedes sumergirte en la presencia De Dios sin salir de allí como un Intercesor.

• Interceder es algo aprendemos en comunidad e individualmente, es quienes somos y en quienes nos convertimos.

• Un intercesor suelta las misericordias y los juicios de Dios. 

“No se alabe el sabio en su sabiduría, ni en su valentía se alabe el valiente ni el rico se alabe en sus riquezas. Mas alábese en esto el que se hubiere de alabar: en entenderme y conocerme, que yo soy Jehová, que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra”. Porque estas cosas quiero, dice Jehová”. Jer. 9:23-24

“Tú dirás todas las cosas que yo te mande, y Aarón tu hermano hablará a Faraón, para que deje ir de su tierra a los hijos de Israel. Y yo endureceré el corazón de Faraón, y multiplicaré en la tierra de Egipto mis señales y mis maravillas. Y Faraón no os oirá; más yo pondré mi mano sobre Egipto, y sacaré a mis ejércitos, mi pueblo, los hijos de Israel, de la tierra de Egipto, con grandes juicios”. Ex. 7:2-4

“ … ¡Jehová! ¡Jehová! fuerte, misericordioso y piadoso; tardo para la ira, y grande en misericordia y verdad; que guarda misericordia a millares, que perdona la iniquidad, la rebelión y el pecado, y que de ningún modo tendrá por inocente al malvado; que visita la iniquidad de los padres sobre los hijos y sobre los hijos de los hijos, hasta la tercera y cuarta generación”. Ex. 34:6-7

"Por eso pues, ahora, dice Jehová, convertíos a mí con todo vuestro corazón, con ayuno y lloro y lamento. Rasgad vuestro corazón, y no vuestros vestidos, y convertíos a Jehová vuestro Dios; porque misericordioso es y clemente, tardo para la ira y grande en misericordia, y que se duele del castigo. ¿Quién sabe si volverá y se arrepentirá y dejará bendición tras de él?" Jl. 2:12

• Abraham, Moisés, Elías, Jeremías, Isaías, Ezequiel, Samuel, David, Daniel, Juan, Pablo, y muchos otros, son ejemplos de Intercesores que están por venir y que reconciliarán todas las cosas en Jesús.

• El mayor catalizador de una vida de intercesión es tener una visión correcta de quién es Dios.

• Yo defino intercesión de la siguiente manera: “Dios nos habla Su palabra y mueve nuestro corazón; entonces, nosotros le decimos Su palabra devuelta, y eso mueve Su corazón; entonces Él abre Su mano y libera Sus recursos en el ámbito terrenal.”, se trata de interactuar en una relación de intimidad.  - Mike Bickle

• Interceder es pararse entre dos partes que están en oposición la una con la otra, con el fin de resolver su enemistad o división. Intercedemos para traer el cumplimiento de las promesas De Dios en un mundo que está en enemistad con Él. – Corey Russel

• "Un intercesor es aquel que toma el lugar de otro o defiende el caso de otro" - Kenneth E. Hagin

Deseo que con la primera parte de este corto estudio, ganes más entendimiento acerca de la intercesión, y te invito a que lo pongas en práctica tomando nuestras guías de oración de blogs pasados.

¿Cómo Orar por Colombia? – Una Guía Práctica
¿Cómo Orar por Israel? – Una Guía Práctica

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John Otálora

[1] Koinonía; comunión o mutuo acuerdo