¿QUE ES EL AYUNO?

Iniciemos con 2 frases celebres:

“Yo creo que el poder del ayuno en relación a la oración es la bomba atómica que Dios nos ha dado para destruir las fortalezas del mal e inaugurar un gran avivamiento y cosecha espiritual alrededor del mundo.” Bill Bright           

“La oración necesita ayuno para crecer plenamente. La oración es la mano con la cual agarramos lo invisible. El ayuno es la otra mano, con la cual nosotros soltamos lo visible... Orar es estirar la mano hacia lo que no vemos; ayunar es soltar todo lo que se puede ver y es temporal. Ayunar nos ayuda a expresar, profundizar y confirmar la determinación que estamos dispuestos a sacrificar cualquier cosa, incluso a nosotros mismos, para obtener lo que buscamos para el reino de Dios.” Andrew Murray

Por definición, el ayuno consiste en abstenernos o restringirnos voluntariamente de comer algunos tipos de alimentos por un tiempo determinado, incluyendo hábitos de nuestra vida cotidiana (entretenimiento, redes sociales, fiestas, plataformas de streaming , etc.).

Referencias Bíblicas: 1 R. 19; 21:27; 1 Cr. 20:3-7; Is. 58; Jon. 3:6-10; Zac. 8:16-19; Jl. 1:14; 2:12-21; Mt. 4:1-11; 6:16-18; 9:15; 17:14-21 Mc. 2: 20; 9: 29; Lc. 4; 2:37; Esd. 8:21-23; Neh. 9:1; Est. 4:16; Dn. 1: 12; 9-10; Hch. 13; 14: 23; Sal. 35:13; 69:10; 1 S. 7:6; 2 S. 12: 22-23

El ayuno es un recurso espiritual bíblico que Dios nos dio, que nos lleva a hacernos más sensibles a Su voz y receptivos a Sus promesas, nos posiciona para experimentar avances espirituales, nos hace crecer en obediencia al Espíritu Santo, nos hace crecer en humildad ante Dios; elimina las distracciones, limpia nuestro corazón de los ídolos, y nuestra conciencia de pensamientos pecaminosos y emociones oscuras.

En el ayuno buscamos realinear los afectos de nuestro corazón con el corazón de Dios; dedicando tiempo a la oración y al estudio de la palabra de Dios; meditando en Su voluntad, buscando Su dirección y reconectándonos de una manera más profunda con el Él.

El ayuno es vaciarnos de nosotros mismos y llenar nuestras vidas de Dios con actividades espirituales. Más que abstenerse de cosas, es sustituir nuestras actividades cotidianas (distracciones) por una mayor búsqueda de Dios. El ayuno crea un vacío en nuestra alma, que puede ser doloroso – en realidad duele cuando lo tomas enserio – pero esa es la oportunidad para darle un banquete de oración y palabra de Dios a nuestro espíritu. El ayuno nos entrena para buscar consuelo en Dios, en lugar de buscar consuelo en nuestra comida favorita, en el entretenimiento, en las adiciones o en los excesos.

2 Corintios 2:9, el apóstol Pablo nos enseña que nuestra debilidad libera el poder de Dios. Cuando ayunamos, le ofrecemos a Dios nuestra debilidad de forma voluntaria. Cuando estamos físicamente débiles por no comer, nos volvemos más sensibles a Dios y experimentamos al Espíritu Santo a un nivel más profundo. Su poder se perfecciona en nuestra vida cuando somos débiles (esto no se refiere a ser moralmente débil), se trata de elegir la debilidad voluntariamente para que el poder de Cristo abunde aún más en nosotros. De eso se trata el ayuno.

Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades (oración, Ayuno, actos de justicia, dar, amar a los enemigos.), para que repose sobre mí el poder de Cristo. 2 Co. 12:9

El ayuno es encontrar satisfacción y disfrute en Dios. El ayuno nos lleva a crecer en devoción a Dios, pero, por otro lado; una forma perversa de devoción es la lujuria (vivir una vida sin restricciones); es decir: ayunar es hacer guerra en contra de los placeres que buscan ganar un lugar prominente en nuestra alma, por encima de Dios. Vivir una vida sin restricciones nos hace propensos a caer en la lujuria, la ofensa, el engaño y el temor; y el ayuno y la oración es el antídoto contra estas tendencias.

Lucas 21:34, 36:   "Pero mantente en guardia, mantente alerta, mantente sobrio… no sea que vuestros corazones se carguen de desenfreno (lujuria, orgias, glotonería, narcicismo, excesos, humanismo) y seducciones (vicios, adicciones, depresión), y de los afanes de esta vida, (produciendo que se les endurezca el corazón) y venga inesperadamente sobre vosotros aquel día." … Ora y ayuna constantemente para que tengas la fuerza y el ingenio necesarios para salir bien librado de todo lo que se avecina y terminar de pie ante el Hijo del Hombre". Énfasis añadidos.

El ayuno no consiste en cambiar o manipular a Dios, no consiste en ganarse Su atención o Su favor, tampoco es una dieta. Ayunar con la premisa de cambiar a Dios es un enfoque incorrecto. Lo que Dios desea es nuestra obediencia y nuestra búsqueda de intimidad con Él. 1 S. 15:22-23

RESUMEN DE BENEFICIOS DEL AYUNO

1. Incrementa nuestro deseo por las disciplinas espirituales
2. Incrementa el Espíritu de revelación.
3. Incrementan los sueños, visiones y visitaciones en las noches.
4. Incrementa nuestra sensibilidad al Espíritu Santo y al Espíritu de convicción.
5. Incrementa nuestra pobreza y hambre espiritual: nuestro deseo por recibir más de Dios y por ver avances del reino de Dios en nuestra familia.
6. Incrementa nuestra abre por la justicia.
7. Crecemos en mansedumbre y pureza de corazón.
8. Viene mayor claridad al oír Su voz.
9. Viene mayor resistencia a la comida y a la cultura.
10. La influencia del Espíritu pasa al puesto delantero y mi alma al puesto trasero.
11. Se alinea nuestro espíritu, alma y cuerpo.
12. Nos libra de seducciones y tentaciones.
13. Nos libra de las voces: ten más, compra más, y acumula más.
14. Dejamos a un lado nuestra fuerza y Dios manifiesta la suya.

DURACIÓN DE LOS AYUNOS DESCRITOS EN LA BIBLIA

• El ayuno de 1 día: esta ha sido una disciplina en los últimos 2000 años. Esta es el más importante porque es la más regular. Lv. 16:29; 23:27
• El ayuno de 3 días (Ester, Pablo): se restringió de comida y bebida, para clamar e interceder. (no más de tres días sin agua). Est. 4:16; Hch. 9:9
• El ayuno de 7 días (David): se restringió de comida.  2 S. 12:15-18, 21-23
• El ayuno de 21 días (Daniel): se restringió de toda comida deliciosa, azúcar, vino. Comía legumbres, frutas; Daniel ayunó para buscar entendimiento. Dn. 1:8-12, 9:3, 10:2-3
• El ayuno de 40 días (Jesús, Moisés y Elías): Ex. 24:12-18; Dt 9:9 / Ex. 34:1-3,28; Dt. 10:10; 1 R. 19; Mt. 4:1-11

EJEMPLOS BÍBLICOS DE AYUNO CORPORATIVO

1. La Iglesia ayunó y oró por la liberación de Pedro de la cárcel (Hch. 12:1-19).
2. Pablo y su equipo en Antioquía ayunaron para recibir dirección profética (Hch. 13:1-3).
3. Pablo y su equipo ayunaron mientras comisionaban ancianos en Listra, Iconio y Antioquía (Hch. 14:23).
4. Israel ayunaba en el Yom Kippur o Día de la Expiación (Lv. 16:29; 23:37; Hch. 27:9).
5. Israel ayunaba durante Purim (Es. 9:30-31).
6. Israel ayunó en los meses cuarto, quinto, séptimo y décimo durante el cautiverio (Zac. 7:3-5; 8:19).
7. Israel ayunó en Mizpa antes del ataque de los filisteos (1 S. 7:3-10).
8. Israel ayunó cuando estaba en guerra civil con los benjamitas (Jue. 20:26-28).
9. Josafat e Israel ayunaron antes de ir a la guerra contra Moab y Amón (2 Cr. 20:3-4).
10. El rey Josías se humilló (2 Cr. 22:11-20).
11. El pueblo de Israel ayunó en tiempos del rey Joaquín (Jer. 36:9-10).
12. La llamada de Joel a las reuniones solemnes nacionales (Jl 1:13-14; 2:12-15).
13. Ester e Israel ayunan ante un holocausto que se avecina en Persia (Est. 3:13; 4:3, 7, 16; 5:6).
14. Esdras y otros ayunaron para buscar protección de Dios en el camino a Jerusalén (Esd. 8:21-23).
15. Nehemías e Israel en Jerusalén ayunaron para renovarse espiritualmente (Neh. 9:1).
16. Nínive ayunó después de la predicación de Jonás (Jon. 3:3-9).

EJEMPLOS BÍBLICOS DE AYUNO INDIVIDUAL

1. Los creyentes ayunan para experimentar a Jesús como el Dios Esposo (Mt. 9:14-15).
2. Jesús ayunó durante 40 días (Mt. 4:1-3; Lc.4:1-2).
3. Moisés ayunó en el monte Sinaí durante 40 días (Ex. 24:18; 34:28; Dt. 9:9, 18).
4. Elías ayunó durante 40 días de camino al monte Horeb/Sinaí (1 R. 19:8).
5. Juan el Bautista llevó un estilo de vida de ayuno (Mt. 11:18).
6. Pablo llevó un estilo de vida de ayuno (2 Co. 6:5; 11:27; Gá. 4:19).
7. Pablo ayunó durante tres días para recibir dirección clara (Hch. 9:9).
8. Pablo ayunó para recibir dirección más clara en situaciones del ministerio (Hch. 13:1-2; 14:23).
9. Daniel ayunó para recibir la revelación sobre el Fin de los Tiempos (Dn. 9:1-3, 20-23; 10:1-3, 12-14).
10. El rey Darío ayunó toda la noche para proteger a Daniel en el foso de los leones (Dn. 6:18-23).
11. Ana, la profetisa, llevó un estilo de vida de ayuno y oración durante más de 60 años (Lc. 2:36-37).
12. Cornelio oró y ayunó para obtener un avance espiritual (Hch. 10:1-4, 30-31).
13. Ester ayunó por la liberación de Israel (Est. 4:16-5:6).
14. El rey Acab se humilló con la oración y el ayuno (1 R. 21:25-29).
15. Ana ayunó por su esterilidad (1 S. 1:7-8).
16. David ayunaba constantemente (2 S. 12:15-23; Sal. 35:13; 69:10; 109:24).
17. Esdras ayunó cuando se lamentó por los matrimonios mixtos de Israel con paganos (Esd. 9:1-6).
18. Esdras volvió a ayunar cuando el pueblo se unió a él en arrepentimiento (Esd. 10:1-6).
19. Nehemías ayunó en Jerusalén por la renovación espiritual de Israel (Neh. 9:1).
20. Nehemías ayunó por la restauración de Israel (Neh. 1:1-11) y la renovación (Neh .9:32-38).

El ayuno es mucho más que esto pero deseamos que este estudio te de un poco más de claridad sobre esta realidad.

John Otálora

Fuentes:
The Rewards of Fasting – Mike Bickle with Dana Candler
The Jesus Fast – Lou Engle
How Fast – Bill Bright